La verdad, no hay muchas ganas de escribir. Venimos de mes y pico de una racha negativa, no en fútbol claro está. El finde nos ganó la tristeza nuevamente, el deber de acompañar a un hermano en horas jodidas, como lo hicimos hace unas semanas, ahora de nuevo. El sábado de noche fuimos al San Lorenzo a jugar un partido de fútbol, entramos al gimnasio con la cabeza en otro lado, esperando esa maldita noticia que sabíamos de un momento a otro nos iba a llegar. No se charló mucho hasta el momento de entrar a la cancha. Allí el Palillo dio el cuadro, dos o tres indicaciones y el Toto Barrera pronunció unas palabras que nos hicieron despertar, abrir los ojos ante lo que se nos venía. Una arenga que nos invitaba a usar un partido de fútbol como un experimento de descarga emocional. Y así entramos... nos comimos la cancha, al rival, al partido. Ganamos de principio a fin contra un muy buen equipo al que neutralizamos y exigimos por todos lados. Corrimos lo que hacía tiempo no corríamos y jugamos, por sobre todas las cosas jugamos, nos divertimos y por 40 minutos nos salimos del bajón. Terminó, ganamos 6-2, sonreimos por el esfuerzo recompensado en un resultado y ya está, volvimos a lo realmente importante, sobrellevar otra vez una prueba como grupo que creo, nuevamente superamos con éxito.
Alikal (6): A. Barrera; G. Harretche, R. Cabrera; S. De Paula y N. Cabrera. D.T: A. Correa / M. Gentile. Ingresaron: J. Yanes, M. Bentancor, D. Travieso.
Goles: G. Harretche (2), J. Yanes (2), N. Cabrera, R. Cabrera
Basturk (2): Destaco la disposición de los buenos amigos de Basturk ante los momentos que pasamos. Gracias.
